Enhorabuena a la ARMH
Cada año ALBA, los archivos de la Brigada Abraham Lincoln, y la Fundación Puffin otorgan un premio, dotado con 100.000 dólares, a las personas o entidades que hayan destacado por su defensa de los Derechos Humanos. El primer premio le fue dado a Baltasar Garzón en 2011. Los siguientes personas que defendieron los DDHH en Guatemala y en EEUU.
Este año la entidad agraciada ha sido la Asociación por la Recuperación de la Memoria Histórica, fundada en el año 2000 por parte de Emilio Silva y un grupo de voluntarios. En sus 15 años de existencia, la ARMH ha llevado a cabo más de 150 exhumaciones de fosas comunes por todo el territorio nacional y recuperado los restos de más de 1.300 víctimas del régimen de Franco, aproximadamente un 8% de los desparecidos. Con esta y otras iniciativas memorialistas se impulsó el derribo del espeso muro de silencio que la Transición había tendido sobre las víctimas del franquismo.
Con este premio ALBA reconoce su labor durante más de 14 años buscando desaparecidos de la dictadura franquista, una labor que refleja los valores de las Brigadas Internacionales. De paso pone en evidencia al actual Gobierno español, que ha clausurado todas las ayudas que, aun insuficientes, se venían dando por parte del anterior ejecutivo socialista. Un Gobierno que se niega a cumplir las recomendaciones de la ONU: juzgar los crímenes del franquismo, anular las sentencias de los Consejos sumarísimos, promover las exhumaciones de las fosas, dejar sin efecto la Ley de Amnistía y convertir en Museo el Valle de los Caídos. Por el contrario, dedica una buena partida a la exhumación de los miembros de la División Azul.
Lo cierto es que el premio, aparte del respaldo moral que supone, viene como agua en Mayo a una asociación cuyo laboratorio de Ponferrada estaba a punto de cerrar por falta de ayudas. La candidatura de la ARMH al premio fue presentada por el escritor Manuel Rivas y apoyada, entre otros, por la periodista Pilar del Río, la fundadora de las Madres de Plaza de Mayo, Nora Cortiñas, el actor Juan Diego Botto y el premio Nóbel de la Paz, Adolfo Pérez Esquivel.
Lo que lamentamos es que la única Comunidad Autónoma, la andaluza, –que había mostrado interés en seguir los principios memorialistas de Verdad, Justicia, Reparación– haya decidido echar al traste el Proyecto de Ley de Memoria Democrática que tanto costó consensuar. Este es el resultado de la falta de coherencia del PSA con los compromisos de gobierno pactados con IUA, y de un estrecho cálculo electoralista que, al final, se volverá contra él.
El 9 de mayo de 2015 se hará entrega del Premio por parte de ALBA y del patrocinador, la Fundación Puffin, con el objetivo de honrar a las Brigadas Internacionales y conectar su legado inspirador con causas contemporáneas.
Ahora esperamos que la ARMH, además de proseguir en su tarea, aborde otras líneas de trabajo, como el descubrimiento de las fosas donde fueron enterrados centenares o miles de voluntarios de las Brigadas Internacionales.